PARA UN DÍA DE “ESOS”

¿Qué hacer en “esos” días donde tu relación con la vida pierde sentido?

“Esos días” pueden ser motivados por diferentes situaciones: un sueño frustrado, un enfado con alguien querido, la pérdida del trabajo, la muerte de alguien cercano, un accidente inesperado, una ruptura sentimental y un largo etcétera. O a veces simplemente levantarte con el pie izquierdo, sin un claro motivo.

Me gustaría sugerir qué hacer en esos días que sin motivo aparente aparece un sin sentido ante la vida. Toma un buen desayuno. Después sal de casa. Ve a la primera parada de autobús o guagua y coge el primer bus independientemente de donde vaya y párate en la última parada. Mientras el trayecto sólo observa a las personas que entran, se acomodan y salen. Llegado al final del trayecto, sal de bus. Busca un parque y siéntate en un banco. Recuerda tu viaje y rescata una mirada que te gusto, un gesto amable de alguien y un lugar que te llamara la atención. Conecta con tus sentimientos.

Ahora ya estás preparado/a para volver a casa. Ve a la parada y espera al bus. En el trayecto de regreso te toca devolver una bonita mirada a alguien y un gesto agradable a otra persona. Vuelve a mirar ese lugar que captó tu atención por algo.

Probablemente ese día que empezó siendo de “esos” ha cambiado. Ah! Y lo bueno de esto es que una vez hecho tiene efecto para más de un día de “esos”. Así que si un día por motivos personales o laborales no puedes hacer el viaje en vivo, el hecho de revivir visualmente tu experiencia te ofrecerá la chispa necesaria para reconvertir tu día e irse llenando de sentido.

                                                                                                                                                    Lucía Jiménez Angós